26 de noviembre, 2013
Jorge Zepeda
Patterson
Director de Sin Embargo
Con base en mi derecho de réplica, le solicito se
publique el siguiente texto.
Me resulta verdaderamente indignante que usted se
preste a publicar la canallada de Sanjuana Martínez. Parecía que se tenía un límite
en la publicación de diatribas, pero con
la de Sanjuana en su portal, se
demuestra que ese límite no existe cuando en algunas personas -como Sanjuana-
lo único que existe es la intención de agredir, golpear, dañar el honor de
otras personas y hacerlo con fines políticos.
La columna escrita por Sanjuana Martínez y publicada
en Sin Embargo, tiene el fin de oponerse a un intento de un grupo de senadoras —entre
las cuales se encuentra Angélica de la Peña— por reformar una ley sobre la trata de personas, y en lugar de dar argumentos técnicos,
legislativos, se recurre a la infamia de atacar al esposo de la senadora De la
Peña, es decir a Jesús Ortega.
En la actitud de Sanjuana Martínez no se busca debatir
con las legisladoras, sino descalificarlas a priori con flagrantes mentiras e
injurias al esposo de una de ellas. En ese propósito Sanjuana no repara en calumniar a diestra y siniestra.
¿Cómo responder a tal bajeza?
¿Haciéndole el juego para que se cumpla la máxima de los
canallas de calumniar para que algo quede?
Al contrario, para evidenciar la actitud aviesa de Sanjuana
Martínez, es que la emplazo a que demuestre ante los lectores de Sin Embargo,
ante la Procuraduría General de la República (PGR), la Procuraduría General de
Justicia del Distrito Federal (PGJDF) y ante cualquier otra instancia judicial
en otra entidad federativa. También ante
la dirección política de mi partido, ante mi familia… el que alguna vez en mi
vida haya estado en los lugares que ella menciona o en cualquier otro en donde
haya existido o exista prostitución o trata de personas.
A que demuestre, además, que la condición de Gregorio Sánchez
como candidato a Gobernador en Quintana Roo, haya tenido que ver con algún
ilícito, de cualquier naturaleza cometido por mi parte. A que demuestre que las
reformas que impulsan tal grupo de senadoras signifiquen, como lo afirma en su
libelo, protección a los delincuentes que se dedican al delito de trato de
personas.
La emplazo a que asista a cualquier agencia del
Ministerio Público y deposite, ante la autoridad respectiva su denuncia contra
mi persona por los delitos que, en su perversidad, afirma que he cometido.
El suyo, Sanjuana Martínez, no es periodismo, es
simple y llanamente expresión de una vulgar felonía.
Atentamente
Jesús Ortega Martínez